En las últimas horas un dirigente gremial fue interceptado por dos sicarios motorizados que le dispararon mientras se dirigía en su moto particular de Sogamoso, Boyacá, a la ciudad de Barrancabermeja, Santander, acompañado de su esposa.
Durante la persecución, la esposa del dirigente -quien es beneficiario de medidas de protección de la Unidad Nacional de Protección (UNP)– llamó a la Línea Vida 103 para solicitar apoyo. La señora comentó que los dos emprendieron el lunes el viaje de regreso a su casa en Barrancabermeja, y que durante el recorrido fueron atacados por hombres armados. Gracias a la pericia del dirigente lograron esquivar las balas y a los sicarios, y se refugiaron en un caserío cercano a la vía.
El dirigente agregó que el domingo en la tarde recibió una llamada donde desconocidos lo amenazaron de muerte por ser un “bocón”.
El equipo de la Línea Vida se comunicó con la Policía de Carreteras de Boyacá para informar del atentado, alertar sobre los hombres armados y solicitar acompañamiento al beneficiario.
La Policía desplegó una patrulla y acompañó al dirigente durante gran parte del recorrido. La Línea también acompañó al dirigente hasta que llegó sin más novedad a su casa en Barrancabermeja. El dirigente se encuentra hoy en la sede de la Fiscalía denunciando el atentado.
