El papa Francisco, de 88 años, se encuentra hospitalizado en el Policlínico Agostino Gemelli de Roma desde el pasado viernes debido a una bronquitis que se le complicó a una infección polimicrobiana en las vías respiratorias, según confirmó este lunes 17 de febrero el Vaticano. Este cuadro clínico complejo obligó a modificar su tratamiento y cancelar sus actividades programadas, incluyendo la audiencia general del miércoles y la oración del Ángelus dominical.